lunes, julio 24, 2006

Grandes Maestros del Budinismo: Pinguis de Cacofonia

¡Loado sea el Budin! Queridos hermanos, hoy inauguramos en nuestro sagrado templo virtual de adoración budínica, esta sección en la que repasaremos la vida y obra de aquellos que nos han dado un ejemplo a seguir en este valle de lágrimas, cortados y capuccinos. En esta oportunidad, trigésimonovenoctavocuadragésimoquinto aniversario de su primera enajenación, nos dejaremos guiar por la guía tan guiante de Pinguis de Cacofonia, quien es considerado uno de los Padres de la tradición budínica.
Nacido en el año mil novecientos cuarenta y veinticinco de la era del azucar negra en Sembleque, que por aquella época formaba parte del Imperio Robiano, Pinguis fue un niño muy precoz. Se dice que su madre, Brambola Scortum de Peteribía, no había conocido hombre, o que no había dejado hombre sin conocer, segun las fuentes, pero todas estan de acuerdo en lo milagroso del nacimiento de Pinguis, que duró cuarenta dias y cuarenta noches, durante los cuales Brambola se la pasó clamando al Budin en un extasis absoluto, y esto mas de dos mil años antes de que se inventara esa pastilla.
Pinguis creció como cualquier otro niño, es decir, hacia arriba, y siempre fue muy observante de la Ley. Comía una Budin por día, y daba gracias al cielo cantando una conocida canción del Profeta Billy Bond. A los cinco años realizó su primer milagro, cuando salvó a su padre de una intoxicación segura al transmutar la ensalada en mal estado que estaba comiendo por un Döner Kebap. A los diez años ingresó en el Monasterio de Monte Garmáz, donde se dedicó a la vida contemplativa y el estudio de los antiguos códices budínicos. A partir de ése momento, y por el resto de su vida, se alimentó solo a Budines, no pudiendo su cuerpo soportar ningun otro alimento´. A la temprana edad de 15 años, escribió la Suma Budilógica, compendio de las enseñanzas de los Profetas y la Recta Moral y Doctrina Budinica. En ella, intentó demostrar la existencia de los Budines mediante sus famosas "pruebas para comprobar la existencia de los Budines", que aún hoy asombran por su lucidez, coherencia e irrefutabilidad. Las diez pruebas que Pinguis formuló fueron las siguientes:
"1)Me acabo de comer uno.
2)Ayer también.
3)Anteayer también.
4)Mi Mamá me vino a visitar y me trajo uno.
5)Nuestro Abad se comió uno ayer.
6)En el Sagrado Libro de Recetas Budinicas dice como preparar varios. Yo nunca probé de hacer uno, pero el cocinero los hace re ricos.
7)Yo lei en varios códices sobre los Budines. Todos dicen que existe, menos los que ya quemamos porque decían que no existían.
8)Los que dicen que no existe son herejes, y tambien se los quema. Si el Bduin efectivamente no existiera, ellos no serian herejes ni se los quemaría. Pero como si, entonces tambien.
9)El Libro de Budin contiene la Verdad única. Asi lo atestiguan todas las fuentes que no fueron quemadas. Y Él dice que existen, asi que...no se discute mas.
10) Mi Mamá me enseñó que existía. ¿Acaso dirías que mi Mamá es mentirosa? ¿Eh? ¡¡¡¿EH?!!! Ah. Mejor. Si no, te mandaba a quemar. "
Estas "10 pruebas para comprobar la existencia del Budin" fueron usadas durante siglos, y aun no han perdido su validez.
Los tiempos de Pinguis fueron turbulentos, y´tuvo que utilizar todo su intelecto para luchar contra la naciente herejía Petiana, que fue una de las primeras en surgrir en la historia Budínica, y sostenía que el Budin no contenía azucar sino edulcorante y que el hombre estaba creado a imagen y semejanza de Jim Carrey. Se dice que él mismo dudó en un momento de flacidez espiritual y estomacal, pero el Sagrado Budin se le presentó en sueños y le dijo "No dudarás de mi azucaradez ni de que en realidad te he hecho a imagen y semejanza de Don Johnson en su época de División Miami, y eliminarás a quien lo contrario dijere, o digiere, o digiera."
Así, Pinguis se enlistó en la Primera Cruzada, que vino después de las 10 Horizontales y Verticales que ya se habían encontrado. Su fama de santidad se extendía como un manto ante él, y en el camino a la Tierra Santa curó a un joven del acné con solo mirarle y decir "tu cara parece un choclo" También curó a una muchacha que sangraba una vez al mes por causa de un espiritu impuro, evitando que sangrara por 9 meses, con sus dias y noches.
Finalmente, fue coronado con el premio del martirio, poco antes de llegar a la Tierra Santa, a manos de un grupo Infieles á quienes intentó convertir, por el bien de su alma, y los instó a comer Budines y Milanesas con papas Firtas, y a dejar sus prácticas obscenas de comer Brocoli a la luz del dia, y tomar cafe descafeinado. Alnte la respuesta negativa de los Infieles, sacó su espada y se encomendó al Sagrado Budin, diciendo a los Infieles: "Por el filo de la espada sabrán que el Budin es la verdad, y que la Milanesa está buenisima, y mas todavia con mostaza", y se dice que peléo solo contra un ejercito de 20000 durante 40 dias y 40 noches, hasta que fue derrotado, para gloria del Gran Budin. Los Infieles (que eran un grupo de cumbia muy popular en aquel entonces) lo sometieron a una tortura larga y dolorosa, cantándole covers del Grupo Green, Ricky Maravilla y Julio Iglesias, pero en todo este tiempo, él no renegó de su fé, y siguió instandolos a que dejen sus malas prácticas. Finalemnte, murió envenenado con una tarta de brocoli, pero su ejemplo perdurará siempre en nuestros estómagos, pues ahora está en el Paraíso donde el Budin nunca falta, la cerveza es rica y barata, los tenedores libres abundan, y la alegria no tiene fin (pues es un fin en si mismo).

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¡Loado sea el Budin por Pinguis de Cacofonia!